La avenida Carlos Izaguirre, uno de los ejes viales más importantes de Lima Norte, será objeto de una remodelación integral después de casi 30 años sin intervenciones significativas. El Gobierno Regional Metropolitano de Lima anunció el inicio de las obras que contemplan la renovación de pistas, veredas y espacios públicos en un tramo de 1,3 kilómetros, comprendido entre la avenida Canta Callao y el límite con la Provincia Constitucional del Callao.
El proyecto, que se ejecutará en un plazo de 120 días calendario, busca no solo mejorar la transitabilidad vehicular y peatonal, sino también transformar la imagen urbana de la zona. La intervención contempla la instalación de 33.137 m² de pavimento rígido, la construcción de 11.582 m² de veredas de concreto y la implementación de 8.589,19 metros lineales de sardineles. Asimismo, se habilitarán 20.686 m² de áreas verdes, se reubicarán árboles ya existentes y se colocará grass en distintos sectores de la vía.
A la par de estas acciones, se instalarán siete nuevos paraderos y diversas señales de seguridad, con el objetivo de garantizar un tránsito ordenado y seguro tanto para automóviles como para peatones. Este componente de la obra se enmarca en un plan integral de movilidad urbana, que busca reducir los tiempos de traslado en Lima Norte y reforzar la seguridad vial en una de las zonas con mayor demanda de transporte público y privado.
Impacto social, urbano y económico
La modernización de la avenida tendrá efectos directos en la calidad de vida de los habitantes de San Martín de Porres y alrededores. Miles de personas se verán beneficiadas con una circulación más organizada, mientras que la mejora en la infraestructura urbana contribuirá a la revalorización de predios y comercios ubicados en el eje vial. Esta dinámica, según las autoridades, generará un entorno más atractivo para la inversión y fortalecerá la actividad económica en el distrito.
Durante la presentación del proyecto, el alcalde metropolitano de Lima, Rafael López Aliaga, planteó al alcalde de San Martín de Porres, Hernán Sifuentes, impulsar una estrategia de desarrollo urbano que promueva la construcción de edificios cerca de las vías principales. “Hay un plan de desarrollo urbano para cambiar el rostro de Lima Norte (…) hay que impulsar la edificación de grandes espacios para vivir, así los propietarios de estas casas van a poder triplicar su valor”, señaló el burgomaestre, en referencia a la oportunidad de transformar el perfil urbano de la zona.


Recuperación de espacios públicos
El inicio de la remodelación fue precedido por una intervención de limpieza y recuperación de espacios en la misma avenida. En un tramo de 1,2 kilómetros, la Municipalidad de San Martín de Porres y la Municipalidad Metropolitana de Lima realizaron labores de despeje que incluyeron el retiro de estructuras improvisadas, residuos de construcción, automóviles abandonados y vendedores informales que se habían instalado a lo largo de la vía durante más de una década.
Algunas personas que utilizaban el espacio como talleres artesanales, viviendas temporales o puntos de reciclaje informal fueron directamente impactadas por esta medida. Sin embargo, las autoridades destacaron que la jornada se llevó a cabo de manera pacífica. Mariella Falla, encargada del área de Fiscalización, afirmó que desde las 7:00 a.m. se trabajó en coordinación con diferentes entidades para liberar el espacio público “sin necesidad de haber hecho uso de la fuerza pública”, según declaraciones brindadas al programa Buenos días Perú de Panamericana Televisión.
La acción permitió también retirar un paradero instalado de manera irregular y varios depósitos informales de materiales reciclados, cuya presencia representaba riesgos para la salud pública, especialmente porque algunos de los ocupantes convivían con adultos mayores y personas con enfermedades crónicas.

Un nuevo rostro para Lima Norte
La remodelación de la avenida Carlos Izaguirre no solo representa una inversión en infraestructura, sino también una apuesta por recuperar la identidad urbana y ofrecer a los ciudadanos espacios seguros y adecuados. La incorporación de áreas verdes, la reubicación de árboles y la instalación de grass buscan asegurar la sostenibilidad ambiental de la obra y garantizar que los vecinos puedan contar con un entorno más saludable y agradable.
De esta forma, la emblemática avenida que conecta directamente con el Callao iniciará una nueva etapa, convirtiéndose en un ejemplo de cómo la articulación entre el gobierno regional, las municipalidades y la planificación urbana puede generar un cambio tangible en la vida de miles de habitantes. La obra, catalogada como una megaobra para Lima Norte, marcará un precedente en la modernización de la infraestructura vial en una de las zonas más dinámicas de la capital peruana.