La Municipalidad de Lima, en el marco de su plan de modernización urbana, inauguró este viernes 18 de julio de 2025 la renovada avenida Francisco Pizarro, una vía emblemática del distrito del Rímac, reconocida por su valor histórico y declarada Patrimonio Cultural. La ceremonia oficial fue encabezada por el alcalde provincial de Lima junto con autoridades distritales, quienes entregaron formalmente la obra a la comunidad a la 1:00 p. m., marcando así la culminación de un proyecto de alto impacto urbano y social.
La intervención en esta arteria clave responde a múltiples objetivos estratégicos: mejorar la fluidez vehicular, reforzar la seguridad peatonal, embellecer el entorno urbano y, sobre todo, preservar el carácter patrimonial de una de las vías más antiguas e importantes de la capital, que conecta la Costa Verde con el centro histórico de Lima.
Los trabajos, que se ejecutaron en horario nocturno para no interferir con el flujo diurno, se iniciaron el 6 de junio y se extendieron por casi dos meses. Durante este período, la avenida permaneció parcialmente cerrada por las noches, manteniendo su operatividad habitual en las mañanas y tardes.
La obra comprendió la renovación de aproximadamente 25 000 metros cuadrados de pistas, que fueron repavimentadas con nueva capa asfáltica y señalización horizontal. Asimismo, se intervinieron 14 000 metros cuadrados de veredas, dotándolas de rampas de accesibilidad universal, baldosas podotáctiles para personas con discapacidad visual, y mobiliario urbano renovado, incluyendo bancas, bolardos, papeleras e iluminación ornamental.
Uno de los aspectos destacados del proyecto fue la incorporación de más de 100 árboles, lo que no solo mejora el paisaje urbano, sino que también aporta a la sostenibilidad ambiental de la zona. Del mismo modo, se añadieron elementos de seguridad vial, como tachas reflectivas y señales verticales, con el fin de ordenar el tránsito vehicular y proteger a los peatones.

Desde la Municipalidad se enfatizó que esta intervención simboliza un avance concreto en el compromiso de mejorar la calidad de vida en los distritos capitalinos, revalorizando al mismo tiempo espacios históricos que habían caído en el deterioro. Con esta renovación, la avenida Francisco Pizarro no solo retoma su funcionalidad como eje de conectividad entre Lima Centro y el Cono Norte, sino que se convierte también en un corredor revitalizado que impulsa el desarrollo turístico, cultural y económico del Rímac.
El enfoque adoptado en esta obra permite conservar la identidad histórica del espacio, integrando criterios técnicos de preservación patrimonial en el diseño y ejecución de los trabajos. De esta manera, se armoniza la modernización de la infraestructura con el respeto a su legado cultural.
Con la entrega de esta renovada vía, la Municipalidad de Lima reitera su apuesta por una ciudad más segura, accesible y funcional, donde el desarrollo urbano conviva en equilibrio con la memoria histórica y el bienestar de sus ciudadanos.