Colombia está haciendo esfuerzos por revivir el sector ferroviario, no solo en términos de carga sino también en el transporte de pasajeros. Este desarrollo de sistemas de trenes de pasajeros puede tener múltiples beneficios para el país, como mejorar la movilidad urbana, reducir la congestión vial y disminuir la emisión de gases contaminantes. Además de ofrecer a los ciudadanos una alternativa de transporte que puede ser eficiente y cómoda. La inversión en proyectos de trenes de pasajeros demuestra una visión a largo plazo por parte de los mandatarios locales y el gobierno nacional, en donde la implementación de este tipo de infraestructura requiere sin duda una planificación cuidadosa, un financiamiento adecuado y coordinación entre diferentes sectores y niveles de gobierno. Igualmente, es importante que se aborden los desafíos técnicos, logísticos y de seguridad que pueden surgir en proyectos de esta magnitud y, de hecho, en los últimos años, en el país se ha observado un gran interés en el transporte ferroviario debido a su capacidad para mover grandes volúmenes de carga y pasajeros de manera eficiente y sostenible. Es por esa misma razón que el día de hoy daremos un repaso por cuales son esos proyectos ferroviarios que se alistan en el país, ya sea para comenzar o continuar con su construcción, o por el contrario se encuentran en estructuración, así que teniendo esto claro comencemos.
Medellín Avanza Hacia una Nueva Era de Movilidad con la Construcción de la Línea del Metro de la 80
La ciudad de Medellín se posiciona como un referente en el desarrollo de sistemas ferroviarios para su movilidad, evidenciado por sus dos líneas de metro en funcionamiento y el emocionante avance de su tercera línea que recorrerá la Avenida 80. Con un enfoque integral, las primeras fases de este proyecto incluyen análisis detallados de suelos, evaluaciones minuciosas de infraestructuras húmedas y secas, y la construcción de intercambios viales operativos, conectados con las calles Colombia y San Juan, para mejorar la conectividad en la zona.
Este ambicioso megaproyecto marca un hito en la modernización del sistema de transporte de la ciudad. La Línea del Metro de la 80 abarcará un recorrido de 13,25 km en forma de anillo, conectando la estación Caribe al norte con Aguacatala al sur, pasando por puntos estratégicos como la Transversal 73 y la Calle 65, e incluso haciendo parada en la Universidad Nacional, en la Facultad de Minas. Este innovador trayecto brindará a los usuarios una opción de transporte moderna y eficiente, permitiéndoles completar el viaje en aproximadamente 32 minutos y beneficiando a áreas como La Floresta.
El proyecto abarcará un total de 17 estaciones, integrándose de manera integral en el sistema de transporte y la red de movilidad de la ciudad. El proceso de desarrollo se divide en cuatro etapas, comenzando con la preconstrucción que durará alrededor de 12 meses, seguida por la construcción del proyecto que se extenderá por unos 48 meses. La puesta en marcha está programada para 6 meses y se culminará con la comprobación de garantía del servicio en 12 meses. Esta meticulosa planificación tiene como objetivo que el sistema de transporte esté operativo para alrededor del año 2028, marcando un hito en la evolución de la movilidad urbana de Medellín.
En términos de financiamiento, el proyecto del Metro de la 80 cuenta con una inversión total estimada de $3,67 billones, donde la Nación contribuirá con $2,59 billones y el municipio aportará los otros $1,08 billones. Este ambicioso esfuerzo conjunto resalta el compromiso de la ciudad y la nación en impulsar la movilidad y el desarrollo sostenible.
Bogotá Avanza de Manera Sólida en la Construcción de su tan Esperada Primera Linea del Metro
Después de décadas de debates y planificación, Bogotá está finalmente en el camino de materializar su ambicioso proyecto de metro. La ciudad ha logrado importantes avances tanto en la construcción de su primera línea como en la licitación de la segunda línea, que se caracterizará por ser subterránea.
En lo que respecta a la primera línea, según los datos recopilados hasta el 31 de julio de 2023 por la Empresa Metro de Bogotá (EMB), el proyecto en su conjunto ha alcanzado un progreso del 25 por ciento, en línea con lo establecido en el plan. Uno de los puntos de destaque es el progreso en las obras de adecuación de suelos en el crucial patio taller en Bosa, considerado el corazón mismo del Metro, que ha alcanzado un avance del 78,37 por ciento. Este logro permitirá adelantar el inicio de la construcción de edificaciones clave en esta área, como el punto de control, oficinas del concesionario, taller de mantenimiento y reparación, entre otros.
Por otro lado, en lo que respecta al intercambiador vial de la calle 72 con Caracas, se han registrado avances significativos, alcanzando el 28,97 por ciento. Para la construcción de los muros pantalla en esta ubicación, esenciales para el paso a desnivel en esta zona y para sostener la estructura del intercambiador vial, se ha empleado más de 5.853 metros cúbicos de concreto.
El avance también es palpable en el tercer frente de obra del metro, conocido como ‘El Pulpo’, donde se están construyendo los apoyos para un nuevo puente vehicular en el costado norte de la avenida Primero de Mayo con carrera 68, así como la relocalización de redes secundarias, que ha alcanzado el 23,12 por ciento.
En cuanto al viaducto, las primeras obras están en marcha a la salida del patio taller en Bosa. La cimentación de una estructura de paso y un puente vehicular metálico, que permitirá cruzar el Canal Cundinamarca, están en progreso. A 1,8 kilómetros de este punto, se están iniciando las actividades para cimentar los pilotes del viaducto que conectará el patio taller con la estación 1, ubicada junto al parque Gibraltar. Por su parte, en la zona de Los Héroes, se están llevando a cabo tareas preliminares para el montaje de la infraestructura que permitirá el inicio de la cimentación de los pilotes en esta área.
Con estos avances significativos, se espera que, para el final de la actual administración distrital, en diciembre de este año, el avance total del proyecto alcance el 35 por ciento, y que, para junio de 2024, cuando finalice este Plan de Desarrollo, se haya alcanzado el 42 por ciento de avance total. Bogotá está más cerca que nunca de ver su sueño de un sistema de metro moderno y eficiente convertirse en una realidad tangible.
La Línea 2 del Metro de Bogotá: Un Logro de Tres Años de Esfuerzo y Planificación
Los últimos tres años han marcado un período de logros significativos para el proyecto de la Línea 2 del Metro de Bogotá, uno de los proyectos de megaobras más esperados por los habitantes de la ciudad. Durante este tiempo, se ha logrado una exitosa estructuración legal, técnica y financiera que consolida la red de metro como la columna vertebral del sistema de transporte masivo en la capital.
Recientemente, en una emocionante etapa, cuatro grupos internacionales presentaron sus solicitudes para construir la tan anticipada segunda línea del metro, que será subterránea y conectará las áreas de Suba y Engativá.
Según los detalles proporcionados por la Empresa Metro de Bogotá (EMB), la Línea 2 tendrá una extensión de 15,5 km, de los cuales 14,3 km serán subterráneos. Esta línea se conectará con la primera línea del metro de Bogotá (PLMB) en la intersección de la calle 72 con la avenida Caracas, donde se está construyendo actualmente un intercambiador vial. Su recorrido llegará hasta la calle 145 con carrera 141, donde se ubicará la única estación elevada, frente al Centro Felicidad Fontanar del Río. Se estima que el tiempo de viaje entre la primera estación y la última será de aproximadamente 20 minutos.
Además, se calcula que el viaje desde la última estación de la Línea 2 (calle 145 con carrera 141) hasta el centro histórico, haciendo transbordo a la primera línea, tomará tan solo 44 minutos, lo que significará una reducción del 42 por ciento en los tiempos de traslado para los ciudadanos.
La Línea 2 del Metro de Bogotá iniciará su operación comercial con 25 trenes y tendrá una capacidad máxima de transportar 49.000 pasajeros por hora en cada dirección para el año 2042.
Este proyecto va más allá de ser una solución de transporte; también representa una oportunidad para una transformación urbana significativa, ya que permitirá intervenir en el entorno donde se ubicará la infraestructura.
La adjudicación del contrato para la construcción de la Línea 2 del Metro de Bogotá se espera que tenga lugar en el primer semestre de 2024, marcando otro paso crucial en el camino hacia un sistema de transporte más moderno y eficiente para la ciudad.
Regiotram de Occidente: Un Paso Firme hacia una Movilidad Integrada en la Sabana de Bogotá
El ambicioso proyecto del sistema de Tren de Cercanías de la Sabana de Bogotá, conocido como Regiotram, ha sido concebido con el objetivo de conectar de manera eficiente y sostenible los municipios circundantes a la capital colombiana. Desde su concepción, la idea de construir un tren de cercanías que enlace los municipios cercanos a Bogotá cobró forma, y el Regiotram de Occidente se erige como el primer proyecto en materializarse. Esta iniciativa de movilidad no solo promete mejorar la integración regional, sino también reducir significativamente los tiempos de desplazamiento de los cundinamarqueses.
El trazado de 39.6 kilómetros de este sistema ferroviario representará un cambio estructural en la dinámica de movilidad de la Sabana Occidente. La distancia de Facatativá al centro de Bogotá, que solía llevar 2.5 horas en carretera, se acortará a tan solo 55 minutos gracias a este proyecto. Entre los hitos de progreso se destacan los avances en los Talleres ANI en Bogotá y en el taller El Corzo en Facatativá, además de la gestión predial que ha sido crucial para la consecución de esta megainfraestructura.
En cuanto al licenciamiento ambiental, se han dado pasos significativos al adelantar reuniones con la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales para la elaboración de un nuevo Estudio de Impacto Ambiental. Aunque se espera que este estudio sea radicado antes de finalizar agosto, se están llevando a cabo labores que no requieren de licencia ambiental. No obstante, es imperativo contar con la licencia en un plazo breve para no detener el avance de las obras y mantener la meta de inauguración fijada para el año 2026.
El sistema de transporte Regiotram de Occidente contará con 17 estaciones, de las cuales ocho estarán ubicadas en Cundinamarca y nueve en Bogotá. Estos puntos estratégicos se conectarán con el sistema de Metro de Bogotá. El proyecto también contempla la disponibilidad de 18 trenes para operar los recorridos entre Bogotá, Funza, Mosquera, Madrid y Facatativá.
El contrato del Regiotram de Occidente se divide en tres fases: preconstrucción, construcción y operación/mantenimiento. Actualmente, se encuentra en la fase inicial, habiéndose adelantado con éxito la gestión predial. La fase de construcción, cuyo inicio estaba previsto para abril de este año, se espera que arranque prontamente, en aras de llevar a la realidad este importante paso hacia una movilidad más eficiente e integrada en la Sabana de Bogotá.
Regiotram del Norte: Un Paso Más hacia la Movilidad Sostenible en la Sabana de Bogotá
El proyecto del Regiotram del norte, un sistema de transporte completamente eléctrico destinado a conectar Bogotá con los municipios de Chía, Cajicá y Zipaquirá al norte de la sabana, ha ingresado en una etapa crucial para avanzar en los procedimientos de licitación y construcción de esta trascendental obra. Una vez operativo, este sistema movilizará a 150,000 pasajeros diariamente, reduciendo los tiempos de desplazamiento en un 60 por ciento.
Con todos los estudios y diseños de viabilidad completados, el proyecto fue formalmente presentado a la Unidad de Movilidad Urbana Sostenible del Ministerio de Transporte, entidad encargada de otorgar la aprobación técnica, un paso esencial para asegurar los fondos y el acuerdo de cofinanciación de la obra. Si el proyecto recibe la aprobación necesaria, está programado para entrar en operación entre los años 2030 y 2031.
La estructuración técnica del Regiotram del norte ha sido alcanzada gracias a los minuciosos estudios y diseños llevados a cabo por Findeter, con una inversión de 33.674 millones de pesos. Este financiamiento provino de la Gobernación de Cundinamarca, la ciudad de Bogotá y el Gobierno Británico, resaltando la importancia y apoyo que este proyecto ha recibido a nivel local e internacional.
En términos de extensión, el Regiotram del norte se extenderá por 48.9 kilómetros, con la mitad del recorrido en Bogotá y la otra mitad en la sabana. De esta longitud, 39.62 kilómetros serán a nivel, 7.96 kilómetros elevados y 1.3 kilómetros deprimidos. El trazado férreo en la capital contempla 6.2 kilómetros en elevación, 17.1 kilómetros a nivel del suelo y 1.3 kilómetros en depresión. En la sabana, la longitud será de 22.5 kilómetros a nivel y 1.76 kilómetros en elevación.
El Regiotram del norte aprovechará la infraestructura ferroviaria ya existente que atraviesa Bogotá de sur a norte por el occidente de la ciudad. Aunque actualmente se utiliza para el tren turístico de la sabana, será necesario adaptar los rieles para adecuarlos a las necesidades de un tren eléctrico de pasajeros.
El siguiente paso en el proceso implica un período estimado de cuatro meses para obtener la aprobación técnica del Ministerio de Transporte. Una vez obtenida, se abrirá el camino para gestionar los recursos necesarios y el acuerdo de cofinanciación con el gobierno nacional, lo que permitirá avanzar en el proceso de licitación y adjudicación de la obra. El Regiotram del norte representa un hito significativo en la búsqueda de una movilidad más sostenible y eficiente en la región, marcando un paso firme hacia un futuro de transporte más moderno y amigable con el medio ambiente.
Trenes de Pasajeros en el Valle del Cauca, el Caribe y el Eje Cafetero
En el panorama de proyectos ferroviarios de pasajeros en Colombia, se encuentran diversas localidades que buscan implementar sistemas de trenes en sus regiones. Entre ellos se destacan Cali y el Valle del Cauca; las ciudades caribeñas de Santa Marta, Cartagena y Barranquilla; así como Pereira, Armenia y Manizales en la región del Eje Cafetero. Estas localidades tienen como objetivo desarrollar iniciativas ferroviarias para mejorar sus conexiones internas. En los próximos meses, tanto el Gobierno como los nuevos líderes electos en las elecciones de octubre se enfrentarán a la tarea de impulsar estos proyectos en sus respectivas jurisdicciones, para el periodo que abarca desde el 2024 hasta el 2027.
Adicionalmente, la Financiera de Desarrollo Nacional está desplegando esfuerzos enérgicos para impulsar otros proyectos de trenes de pasajeros. Esta entidad tiene a su cargo la estructuración de importantes megaobras, entre ellas, el proyecto del tren de cercanías en el Valle del Cauca. Además, la entidad ha manifestado su interés en involucrarse en proyectos similares en la región caribeña y en el Eje Cafetero. Según lo comunicado por el vicepresidente de estructuración y banca de inversión de la Financiera de Desarrollo Nacional, se está avanzando en la estructuración de dos proyectos ferroviarios adicionales: el Tren Regional del Caribe y el Tren de Cercanías del Valle.
En relación a este asunto, el ejecutivo mencionó que el proyecto en el Valle del Cauca ha avanzado considerablemente. Detalló que este proyecto se llevaría a cabo en tres etapas: la primera comprendería el tramo entre Cali y Jamundí, la segunda abarcaría desde Cali hasta Yumbo y, finalmente, la tercera conectaría Cali con Palmira, incluyendo la vinculación con el aeropuerto Alfonso Bonilla Aragón. Por esta razón, en los últimos meses se han ejecutado los estudios y diseños de factibilidad, con el objetivo de que en los próximos meses se pueda entregar toda la documentación necesaria para iniciar el proceso de aval técnico. Esto permitiría contemplar, hacia el segundo trimestre del 2024, la posibilidad de abrir la convocatoria para licitar el tramo Cali – Jamundí.
Es relevante destacar que en la fase de factibilidad se han invertido más de $30.000 millones para disponer de todos los detalles técnicos requeridos para un proyecto de esta envergadura. La meta es que en el 2024 se pueda dar inicio a la fase contractual, en la cual se determinará la entidad contratista responsable de ejecutar las obras. En Cali, el enfoque se centrará en el corredor de la Calle 25, el cual continuará hacia el sur para conectarse con la ciudad de Jamundí, ubicada en los límites del departamento del Cauca.
Es importante señalar que las autoridades locales de Cali han incorporado este medio de transporte en el marco del nuevo Sistema Inteligente Integrado de Transporte Público para la ciudad. En esta estructura, el MÍO constituiría el núcleo central y el Tren desempeñaría un papel vital al establecer una significativa conexión entre las zonas norte y sur de Cali. De acuerdo con las estimaciones, se espera que la primera fase del Tren de Cercanías esté en funcionamiento para el año 2028, siempre y cuando no se presenten inconvenientes mayores o contratiempos durante la ejecución de la obra, una vez esta se inicie.
Otra propuesta que se agrega a este esfuerzo es la que está siendo considerada y promovida por la FDN: la conceptualización de un sistema de tren de cercanías para el Eje Cafetero, que conectaría las ciudades de Armenia, Manizales y Pereira. Este proyecto requeriría intervenciones a lo largo de 165 kilómetros y una inversión aproximada de $5,2 billones. Con esta iniciativa se abriría la posibilidad de trasladar tanto carga como pasajeros.
Por último, se encuentra el proyecto del Tren Regional del Caribe, el cual ha sido planteado en una fase inicial por Findeter y tendría como objetivo unir las ciudades de Barranquilla, Cartagena y Santa Marta. No obstante, es importante señalar que su desarrollo podría llevar algunos años más y dependerá en gran medida de los estudios y diseños definitivos. En definitiva, un conjunto significativo de proyectos está avanzando a un ritmo constante, lo que contribuirá a que Colombia cuente con un sistema ferroviario integral en un corto y mediano plazo.