Bogotá atraviesa uno de los momentos más importantes de su historia reciente. Tras décadas de atraso en infraestructura y movilidad, la capital colombiana ha comenzado a ejecutar y planificar una serie de megaproyectos que buscan devolverle su lugar como la ciudad más importante y avanzada del país.
En nuestro informe anterior presentamos obras como la Primera y Segunda Línea del Metro, el Regiotram de Occidente, los cables aéreos y nuevas troncales de TransMilenio, proyectos que poco a poco transforman la movilidad y conectividad de la ciudad. Sin embargo, el cambio no se detiene ahí.
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En esta segunda parte, recorreremos otros proyectos igual de ambiciosos y estratégicos que están en marcha o se planean ejecutar en los próximos años, obras que no solo modernizarán la infraestructura bogotana sino que renovarán su espacio público, impulsarán su economía y la proyectarán como una ciudad de futuro.
El Dorado Max
Uno de los proyectos más ambiciosos y estratégicos para el futuro de Bogotá y de todo el país es sin duda El Dorado Max, la gran expansión del principal aeropuerto de Colombia que busca duplicar su capacidad operativa y convertirlo en uno de los terminales aéreos más modernos y eficientes de América Latina. Actualmente, El Dorado moviliza cerca de 40 millones de pasajeros al año, cifra que lo posiciona como uno de los aeropuertos más transitados de la región, pero que ya empieza a mostrar señales de saturación en sus operaciones.
El plan contempla la ampliación de la terminal actual, la construcción de nuevas plataformas, una mayor capacidad para atender vuelos nacionales e internacionales y la adecuación de sus pistas para recibir aeronaves de mayor tamaño. Además, se proyecta la construcción de una segunda terminal y nuevas zonas de carga, lo que permitirá fortalecer a Bogotá como hub logístico para América Latina.
Ya en el ámbito vial, otra de las características primordiales de esta expansion, se llevarán a cabo desarrollos importantes en las calles 26 y 63, y se construirán nuevos edificios de parqueadero, incluyendo algunos con sótanos, para responder al creciente número de vehículos.
El Dorado Max no solo busca responder al crecimiento sostenido del tráfico aéreo de la ciudad, sino también preparar a Bogotá para atender las demandas de una economía más dinámica, un mayor flujo de turistas internacionales y la llegada de nuevas inversiones.
Se estima que este proyecto generará más de 25 mil empleos directos e indirectos durante su ejecución, impactando positivamente la economía local Y pasando de movilizar a unos 46 millones de personas al año hasta llegar a 73 millones. Asimismo, mejorará los tiempos de conexión, aumentará la competitividad de Bogotá y reducirá los cuellos de botella que hoy afectan a pasajeros y aerolíneas. El Dorado Max es, sin duda, una obra vital para consolidar a Bogotá como un centro de negocios, turismo y logística de talla internacional.
Ciudad Lagos de Torca
Al norte de Bogotá se gesta uno de los desarrollos urbanísticos más grandes y ambiciosos de las últimas décadas: Ciudad Lagos de Torca, un megaproyecto que transformará más de 1.350 hectáreas de terreno en una moderna zona urbana planificada, con viviendas, parques metropolitanos, hospitales, colegios, avenidas y centros comerciales, diseñada para mejorar la calidad de vida de miles de ciudadanos y reducir el déficit habitacional de la capital.
El proyecto, ubicado entre la Autopista Norte y la Carrera Séptima, y entre las calles 183 y 245, contempla la construcción de 130.000 viviendas, de las cuales 50.000 serán de interés social, integradas con zonas verdes, corredores ambientales y equipamientos públicos. Lagos de Torca no solo busca ser un espacio para vivir, sino una ciudad dentro de la ciudad, donde sus habitantes cuenten con servicios educativos, de salud, recreativos y comerciales a corta distancia, promoviendo el concepto de ciudad compacta y sostenible.
Uno de los aspectos más destacados de este megaproyecto es la recuperación ambiental, ya que incluirá la creación de cinco grandes parques metropolitanos y la restauración de cuerpos de agua y humedales, protegiendo más de 200 hectáreas de áreas ambientales. Además, se construirán nuevas avenidas como la extensión de la Avenida Boyacá, la Avenida El Polo y la Avenida Novena, mejorando significativamente la movilidad en el norte de la ciudad y su conexión con municipios vecinos como Chía y Cota.
Con una inversión cercana a los 15 billones de pesos, Ciudad Lagos de Torca se perfila como uno de los desarrollos urbanos más importantes de Bogotá en el siglo XXI, un proyecto que no solo aliviará la presión de crecimiento hacia el sur y occidente, sino que también redefinirá el concepto de urbanismo sostenible en la capital.
Centro Internacional de Comercio Mayorista San Victorino
La Empresa de Renovación y Desarrollo Urbano de Bogotá (RenoBo) avanza en el desarrollo de uno de los megaproyectos más ambiciosos para el centro de la ciudad: el Centro de Comercio Mayorista San Victorino, una iniciativa que busca modernizar y revitalizar esta tradicional zona comercial, ubicada en las manzanas 10 y 22 del barrio Santa Inés. Reconocido como uno de los principales polos comerciales de Bogotá y visitado diariamente por más de un millón de personas, San Victorino enfrenta desde hace años serios desafíos de movilidad, seguridad y ocupación desordenada del espacio público.
El proyecto contempla la construcción de un complejo comercial de 92.950 metros cuadrados, de tamaño similar a centros comerciales como Unicentro o Plaza de las Américas, y la generación de más de 8.600 empleos directos e indirectos, lo que representa un impulso significativo para la economía capitalina. También incluye la recuperación de 7.500 metros cuadrados de espacio público, con el fin de mejorar el entorno urbano para comerciantes, compradores y residentes.
Uno de los retos más importantes será la reubicación y formalización de los vendedores informales, una problemática histórica en este sector. El megaproyecto prevé espacios asignados para el Instituto para la Economía Social (IPES) y zonas disponibles para que los comerciantes tradicionales y quienes hacen parte de acuerdos previos puedan vincularse formalmente al nuevo centro de comercio.
Este megaproyecto se perfila como una de las apuestas más relevantes para transformar la dinámica económica del centro de Bogotá, con una estructuración financiera y técnica diseñada para superar los intentos fallidos del pasado y garantizar su viabilidad. Su desarrollo, además de ordenar el comercio mayorista, contribuirá a fortalecer la economía local y regional, dignificar la labor de miles de comerciantes y modernizar una de las zonas más representativas de la capital.
Cable Aéreo de La Calera
Uno de los proyectos más novedosos y esperados para mejorar la movilidad y conectividad de Bogotá con el municipio cercano es el Cable Aéreo de La Calera, una obra que no solo facilitará el transporte de miles de personas que residen en municipio, sino que también busca convertirse en un atractivo turístico y paisajístico para propios y visitantes.
El proyecto contempla la construcción de un sistema de teleférico con cabinas modernas que recorrerá desde la zona urbana de Bogotá hasta el casco urbano de La Calera, superando las dificultades topográficas de esta zona montañosa y reduciendo significativamente los tiempos de desplazamiento, que hoy en día pueden superar los 90 minutos en hora pico por carretera. Se proyecta que el recorrido completo en el cable aéreo tome apenas 25 minutos, lo que permitirá descongestionar la vía tradicional y ofrecer una alternativa limpia y eficiente de transporte.
El sistema de cable tendría una extensión de 5,8 kilómetros y conectaría el casco urbano de La Calera con una de tres posibles ubicaciones en Bogotá: las calles 134, 153 o 161. La elección dependerá de dos factores: el menor impacto ambiental y la demanda de los habitantes de La Calera. El recorrido atravesaría los cerros orientales con un sistema constructivo de bajo impacto. Se instalarían pilonas cada 500 metros, lo que reduciría la intervención en el entorno
Además, este proyecto será complementado con nuevas estaciones intermodales que integrarán el cable aéreo con rutas de transporte público urbano, cicloinfraestructura y zonas de parqueo para bicicletas, promoviendo así una movilidad sostenible y multimodal. El recorrido tendrá tres estaciones principales: una en la ciudad, otra intermedia en la zona rural y una en el centro poblado de La Calera, beneficiando a cerca de 50.000 personas diariamente.
El Cable Aéreo de La Calera no solo tendrá un impacto social y de movilidad, sino también ambiental, ya que reducirá la emisión de gases contaminantes al disminuir la circulación de vehículos particulares en la vía tradicional, y aportará a la integración de Bogotá con los municipios vecinos. Este proyecto, junto con los otros cables aéreos planeados en la ciudad, consolida la apuesta de Bogotá por implementar sistemas de transporte sostenibles y adaptados a su compleja geografía.
Campus de Ciencia, Tecnología e Innovación de Bogotá
En el marco de su transformación urbana y su apuesta por convertirse en una ciudad más competitiva y moderna, Bogotá proyecta la construcción de un ambicioso Campus de Ciencia, Tecnología e Innovación, un espacio de talla internacional que concentrará instituciones educativas, centros de investigación, laboratorios, empresas de base tecnológica y espacios de coworking, consolidando un ecosistema de conocimiento sin precedentes en el país.
El edificio sede del CTIB será una estructura de 44.000 metros cuadrados distribuidos en 23 pisos, que integrará zonas de servicios especializados para actividades de ciencia, tecnología e innovación, oficinas flexibles, espacios de coworking, así como áreas de interacción, bienestar y comercio, diseñadas para estimular la interacción entre los sectores público y privado. Este edificio se levantará en el predio que actualmente ocupa la Gran Carpa de las Américas de Corferias, y se estima que su construcción concluirá a mediados de 2028.
Las 247 hectáreas que conforman el Campus se ubican en el corazón productivo de la capital, entre las localidades de Puente Aranda y Teusaquillo, zonas que se proyectan como el núcleo de la Bogotá inteligente, sostenible y más productiva que visualiza la administración distrital.
En términos de impacto social, económico y laboral, las proyecciones señalan que con la puesta en marcha de este Campus se beneficiarán 36.000 personas al año, se capacitarán cerca de 3.000 personas anualmente y se generarán 2.700 empleos directos cada año hasta 2047, consolidando de esta manera una dinámica sostenible de generación de oportunidades.
Transformación Urbana
Estos proyectos que acabamos de recorrer son solo una muestra del ambicioso plan de transformación que Bogotá está viviendo. Desde la expansión de su aeropuerto hasta nuevos desarrollos urbanos, pasando por innovaciones en movilidad y un impulso a la ciencia y la tecnología, la ciudad se prepara para dar un salto cualitativo que la posicionará entre las grandes metrópolis del continente.
Pero la transformación de Bogotá continúa. En próximos informes estaremos analizando otros megaproyectos estratégicos que también serán clave para el desarrollo de la ciudad y que seguirán moldeando su futuro, demostrando que, tras años de retos y dificultades, la capital avanza con paso firme hacia un futuro moderno, sostenible y lleno de oportunidades para todos sus habitantes.
