La capital colombiana avanza con paso firme hacia la transformación de su sistema de transporte público. En una jornada de especial significado, este lunes festivo se llevó a cabo, desde la ciudad de Changchun en China, la presentación oficial del primer tren que conformará la Primera Línea del Metro de Bogotá (PLMB).
El evento protocolario, transmitido en directo a través de redes sociales, contó con la participación virtual del alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, y del gerente de la Empresa Metro de Bogotá (EMB), Leonidas Narváez, quienes se conectaron vía Instagram Live con el ingeniero Javier Descarga Napoles, director de la interventoría BOT Metro de Bogotá, desde la fábrica de trenes en el gigante asiático.
A esta ceremonia se sumaron importantes figuras del sector ferroviario internacional, como Wu Yu, vicepresidente de la multinacional Chec, empresa accionista mayoritaria del consorcio encargado de la obra; el presidente de la junta directiva de CRRC, la firma fabricante de los trenes; y representantes de la interventoría y de la concesión de la PLMB, quienes celebraron este avance significativo que marca un antes y un después para la movilidad de la capital colombiana.
Un tren que supera sus primeras pruebas y se alista para llegar a Colombia
El anuncio más relevante de la jornada fue la confirmación de que este primer tren, junto con una segunda unidad, superó con éxito las pruebas estáticas y dinámicas exigidas por las normas internacionales de operación ferroviaria, acumulando en total 2.500 kilómetros de recorrido en diferentes evaluaciones técnicas. Entre los aspectos revisados se incluyeron velocidad, capacidad de frenado, funcionamiento de las comunicaciones, sistemas de ventilación e iluminación, impermeabilidad de las estructuras y operación de las puertas.
Este primer tren, que comenzó a fabricarse en abril de 2023 en los talleres de CRRC en Changchun, está listo para ser embalado en contenedores especiales y transportado hacia el puerto de Shanghái. Desde allí, emprenderá un viaje marítimo de aproximadamente 58 días, con llegada prevista al puerto de Cartagena, para finalmente ser trasladado a Bogotá en septiembre próximo.
De manera paralela, la producción de los demás trenes avanza según el cronograma establecido. Se prevé que durante 2025 salgan de fábrica dos o tres unidades adicionales y que, en julio de 2026, se termine de fabricar el último tren de la flota, conformada en total por 30 unidades. La meta es que en diciembre de 2026 toda la flota se encuentre ya en Bogotá, alojada en el patio taller de Bosa.
Características técnicas y operativas: un metro pesado de clase mundial
Los trenes que conformarán la Primera Línea del Metro de Bogotá son de tipología pesada, diseñados para movilizar grandes volúmenes de pasajeros de forma continua y segura. Cada tren estará compuesto por seis vagones: dos de ellos serán cabinas ubicadas en los extremos, las cuales no contarán con motor y funcionarán como coches remolque; mientras que los cuatro vagones centrales sí serán motrices.
Cada unidad alcanzará una longitud total de 134 metros y tendrá capacidad para transportar hasta 1.800 pasajeros, de los cuales 252 podrán viajar sentados. Por coche, el promedio de ocupación será de 300 personas, y cada tren dispondrá además de dos espacios especialmente acondicionados para usuarios con movilidad reducida o que requieran silla de ruedas.
En materia de accesibilidad y comodidad, los trenes contarán con 24 puertas por costado, para un total de 48 puertas por unidad, las cuales se abrirán y cerrarán de forma sincronizada con las puertas de las estaciones. El sistema informará a los pasajeros, tanto en formato visual como auditivo, sobre la siguiente estación y las próximas paradas, replicando los estándares de los sistemas de transporte masivo de referencia a nivel mundial.
Una de las innovaciones más destacadas es que cada vagón tendrá integrado un sistema que medirá en tiempo real el peso de los pasajeros a bordo. Esta función permitirá advertir a los usuarios, mediante señalización interna, cuáles coches tienen mayor o menor carga, incentivando una distribución equitativa y mejorando la experiencia de viaje.
Automatización total con tecnología CBTC GoA4
Sin duda, uno de los aspectos más importantes de la nueva flota del Metro de Bogotá es la incorporación de la tecnología CBTC (Communications-Based Train Control) o por su significado en español: Control de trenes basado en comunicaciones con nivel de automatización GoA4, el grado más alto de automatización ferroviaria disponible en el mundo. Este sistema permitirá operar los trenes sin conductor, garantizando altos niveles de seguridad, eficiencia y puntualidad.
Así Son Los Primeros Trenes Del Metro De Bogotá Que Fueron Entregados Y Que Llegaran En Septiembre
El CBTC GoA4 facilita que los trenes mantengan una frecuencia mínima de paso de 90 segundos, controlando de forma remota la velocidad, la distancia entre unidades y el movimiento de puertas, desde dos centros de operaciones: uno ubicado en el patio taller de Bosa y otro en la Avenida Caracas. Esta tecnología ya es utilizada en sistemas ferroviarios avanzados en ciudades como Shanghái, Madrid, París y Berlín.
En el caso de Bogotá, el sistema CBTC es fabricado en España por la empresa Alstom y posteriormente instalado en los trenes por CRRC en sus talleres en China. Esta integración internacional garantiza un estándar de calidad homologado y probado en otros sistemas urbanos de alta demanda.
Diseño adaptado a las condiciones de Bogotá
Además de su avanzada tecnología, los trenes fueron diseñados teniendo en cuenta las particularidades de la capital colombiana. Por ejemplo, cada unidad cuenta con dos ventanas adicionales respecto a los modelos estándar de CRRC, lo que permitirá una mayor entrada de luz natural y una panorámica más amplia para los pasajeros, mejorando así la experiencia de viaje.
Adicionalmente, los pasamanos de los vagones fueron instalados a una altura determinada a partir de un estudio de antropometría realizado entre la población bogotana, garantizando así una sujeción cómoda y ergonómica para la mayoría de usuarios. Las sillas, por su parte, son ignífugas, es decir, no propagan fuego en caso de incendio, y la pintura exterior de los trenes cuenta con propiedades antigrafiti para proteger la imagen institucional del sistema.
Sostenibilidad y eficiencia energética
El Metro de Bogotá también se destaca por su enfoque sostenible. Los trenes estarán equipados con un sistema de frenado regenerativo que permitirá aprovechar hasta el 30 % de la energía generada durante las frenadas para transferirla al tren que se encuentre iniciando su recorrido, reduciendo así el consumo de energía eléctrica de la red.
Para su operación, el sistema contará con tres subestaciones eléctricas que garantizarán el suministro constante y seguro de energía. Además, gracias a su motorización eléctrica y al diseño en U del tablero del viaducto, los trenes generarán niveles de ruido inferiores a los del tráfico vehicular de la ciudad. En zonas donde persista el riesgo de afectación sonora, se tiene previsto instalar pantallas acústicas para mitigar cualquier impacto.
Avance del proyecto y próximos hitos
A corte del 31 de mayo de 2025, la ejecución global del proyecto de la Primera Línea del Metro de Bogotá alcanza un 55,42 %. A la fecha, se han construido 5.346 metros de viaducto en diferentes tramos. Uno de los objetivos más relevantes en el corto plazo es alcanzar, para mayo de 2026, la construcción de 5.760 metros lineales de viaducto entre el patio taller y la estación cuatro, tramo indispensable para la realización de las pruebas estáticas y dinámicas de los trenes en suelo capitalino.
De acuerdo con el cronograma actualizado, las denominadas “marchas blancas” —pruebas en vacío sin pasajeros— se iniciarán en septiembre de 2027, para posteriormente, en marzo de 2028, dar inicio oficial a la operación comercial de la Primera Línea del Metro de Bogotá, cumpliendo así con un cronograma que, pese a sus complejidades técnicas y logísticas, avanza con rigurosidad.
